De la vida anterior de Kimbo, poco podemos contar, solo que hubo alguien que se apiadó de el, y lo sacó del infierno.
Kimbo, es un labrador, de tres años de edad. Es todo un galán y tiene una pose que nos enamora a todos, es muy tranquilo, y aún no lo hemos oido ladrar, te mira con esos ojos tan oscuros y de una forma tan dulce, que nos es imposible imaginar que se quede mucho tiempo con nosotros. Seguro que ya hay alguien que se ha enamorado de él, ¿verdad?
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